Madre nuestra, madre de todos
los Ángeles del cielo, tu mirada es atenta en un futuro agridulce pero
prometedor y sobre todo, de salvación, salvación para todos los hombres del
mundo…tu hijo se ha dado cuenta de tu mirada perdida en ese futuro, como si
mentalmente te dijera ‘’mama, ¿en que piensas?’’; pero tu, eres fuerte, eres la
elegida por Dios para ser la mujer de todas las mujeres, aquella que padeció
mas que nadie e intercede por todo aquel que te pide; desde el primer instante
que el ángel Gabriel te anunció la buena nueva que sobre tus brazos llevas, no
hay día que pienses en esa pasión que hará que millones de personas se salven
por su causa.
''A mis grandes cofrades Enrique Salvo, Juan Antonio Fernandez y Dolores Torres''