Los funcionarios acaban de montar los palcos en la Avenida
de la Constitución a pleno sol como si de un Domingo de Ramos se tratase, que
bien se asoma ya a la vuelta de la esquina, deseo de entrar en la mariana
ciudad de Sevilla; las exposiciones de cuadros y fotos como reliquias
descansaran en las salas que en su día cubrieron cientos de creyentes, y los
tapices rojos sacramental, bailan al son de la suave brisa de la noche.
Miniaturas en calle Sierpes, olor a incienso en cada portal,
y las sillas de la campana conversan apiladas para que estas se puedan montar,
con el amor mas grande que todo cristiano lleva en su corazón, el esperar de
todo un año; el Señor de Sevilla aun permanece atento en San Lorenzo cubierto
por curioso cristal, mientras su talón sigue siendo fiel a los labios de cada
forastero que lo desee besar; el llamador del palio sigue intacto con el animo
de despertar, a esos guerreros de fé en trabajaderas, para llevar a Sevilla la
devoción que nunca morirá.
Candelería ansiosa, en la madruga alumbrará, y el prioste
con escalera firme retoca esos labios de cera para que esta nunca muera a la
luz de la luna bajo un cielo estrellado, por luceros, por aquellos astros que
durante todo este tiempo, no han dejado de vigilar.
El pan de oro sobre canastilla, los carteles de ‘’No tocar’’,
los Sagrados Titulares sobre los pasos ya están, mientras aun en el Dulce Nombre
de María se puede escuchar, esa contestación sublime del Maestro a Anás, que reprochándole
uno de sus criados dio una bofetá.
Ahora solo nos queda mirar al cielo, como la Virgen de la
Palma mira ya, buscando esa calma de los cielos, para poder procesionar.
Buena Estación de Penitencia Hermanos.
1 comment:
buen articulo moises,y magnificos detalles fotograficos de israel,buena estacion d epenitencia a todos esperando que el tiempo lo permita.
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