Saturday, June 25, 2011

Wednesday, June 22, 2011

Enrique Calero, un futuro prometido de la imaginería sevillana.

Moisés Viretti. En los tiempos que corren, (a lo que imaginería histórica y contemporánea se refiere), los cofrades de pró tenemos la suerte de seguir contando con la presencia de buenos maestros profesionales, que gracias a ese ‘’ arte de manos bendecidas´´ (como religiosamente pienso), y gracias a sus obras, nuestra fe sigue firme como pilar básico de nuestro cristianismo y devoción mariana. Juan de Mesa, Castillo Lastrucci, Buiza, Martínez Montañés, Ortega Bru, La Roldana…..y muchos mas maestros inconfundibles que nos dejaron su legado, en el que ha día de hoy, sus obras son fuentes en devoción de miles de cofrades. Tras la imaginería histórica, la imaginería contemporánea no pasa desapercibida ante los jóvenes y mayores cofrades, en el que ha día de hoy, ya forman parte de la ‘’nómina clásica’’ de una imaginería ansiada por todos; una profesionalidad que forma parte de su vida profesional que tradicionalmente el sevillano suele decir ‘’este caballero o señorita come de esto’’. Maestros como Dube de Luque, Fernando Castejón, Álvarez Duarte, Hernández de León, Jaime Babio, Juan Antonio Blanco, Darío… y muchos más, que por la gracia de Dios, hacen propio su hecho histórico a día de hoy en nuestra mariana ciudad de Sevilla y resto de Andalucía.

Tengo la suerte de conocer a casi todos los imagineros actuales y anteriormente citados, pero he de admitir, que me sorprende la obra y trabajo de un joven de tan solo 18 años, en el que este ya tenga trabajo para una larga temporada para particulares de Sevilla y resto de Andalucía, y se pueda decir…’’yo me dedico a esto y vivo de esto’’.

Enrique Calero fue acolito’ y muy tempranamente, ser solicitado por este maravilloso mundo del arte de ``fotografiar el cielo´´; aunque bien nunca tenemos que olvidar, que el costal que acaricia su cuello para mecer las inconfundibles trabajaderas de María Santísima del Amor, es su pleno delirio.

Cada vez mas jóvenes alcanzan metas en nuestro ‘’mundo capillita’’ siendo educados, por no decir a la perfección, teniendo una preparación perfecta para poder afrontar retos que normalmente hicieron personas con mas edad. He de decir, que así afronto actualmente mi cargo como Hermano Mayor más joven del país, que con tan solo 26 años me adentré en este maravilloso mundo, aunque bien tengo que admitir, que una vara dorada ‘’pesa bastante’’.

Ese es el reto, un reto cargado de ilusión en el que todos estamos involucrados, y especialmente los más jóvenes que serán los descendientes de todo tipo de artes cofradieros. Aquí pues os presento este caso en concreto; Enrique Calero Rivera, un futuro prometido de Dios para la imaginería sevillana…